Porque también queremos y vamos a hablar de la violencia que se nos ha colado en los libros. Con nosotros están: Rosa Amor del Olmo. Doctora en Filosofía Licenciada en ética y Filosofía. Editora de Isidora, (Revista de Estudios Galdosianos) y muchas cosas más. Su último libro, “Galdós. Diálogos Biográficos”, está en la lista de los más vendidos y recomendados del verano. ¡Si todavía están, o se van de vacaciones, se lo recomendamos. ¡No se lo pierdan!
1 – ¿Cómo ha tratado la editorial a la mujer literata, escritora?
2.- ¿Qué papel ha desempeñado la mujer entre los protagonismos dentro
de las obras literarias?
Las primeras respuestas apuntan Multitud de matices. Hemos de contemplar a la mujer como sujeto cultural, que lee y también escribe; asiste a espectáculos teatrales y también los representa, igualmente en la danza, en la música,etc. Pero nos vamos a centrar hoy sólo en la escritura..
Históricamente se puede contemplar el fenómeno de las mujeres escritoras, encontrando unas contadas grandes autoras.
¿Es positivo reconocerse como mujer escritora?
¿Existe la escritura femenina?
Hemos de reconocer que la mujer parte históricamente de una gran desigualdad, o deberíamos llamarlo discriminación. Todavía en 1872 en España sólo se habían autorizado a tres mujeres para asistir a la
universidad.
Salvado ese escalón, 145 años después nos preguntamos:
¿Cuánto les ha costado a las mujeres alcanzar el prestigio literario?
¿Quedan hoy vestigios todavía de aquella injusta discriminación?
¿También en la Literatura hay “techo de cristal»?
Rosa ha publicado mucho sobre Galdós. Desde su tesis doctoral, sobre el teatro de Don Benito, en 1995. Luego impulsó la edición de la revista de estudios galdosianos.
Hoy la revista llamada ISIDORA, es además una editorial para editar sus libros y de otros autores. Para saber más del CV de Doña Rosa pueden acudir al programa “27 letras, un libro y algo más» en esta misma radio social…” cuando presentó su último libro arriba nombrado.
No obstante, nos comentan que con los mismos esfuerzos realizados por ellas, podrían haber conseguido más reconocimiento, si no hubieran sentido muchas veces una cierta indiferencia por razones que no aciertan a explicarse.
En muchos casos se hace aprecio a la literatura de una mujer si no molesta, si no incordia; pero afirman que el escritor/escritora tiene que ser problemático, plantear dilemas que despierten las conciencias de los lectores, gusten o no a los poderes fácticos.
Pero nos ponen sobre la mesa la conciliación familiar, la educación recibida, los estereotipos existentes en la sociedad. Todo ello exige un mayor esfuerzo a la mujer para acabar consiguiendo aún menos. Pero no quieren ser plañideras.
Publicar con seudónimos de varón para que se reconozca mejor un ensayo todavía es práctica habitual.
Como nuestra invitada es apodada “la viuda de Galdós”, nos ha contado también muchas cosas de la vida de este ingenio decimonónico y de todas sus obras con título o con nombre de mujer.
También hemos puesto en las ondas los diferentes comportamientos de los hombres en grupo respecto de la mujer, lo que no ocurre a la inversa.
Como el tiempo se nos iba y el espacio se acaba, ruego a nuestros oyentes escuchen el programa porque tendrá continuación durante el presente mes, como las telenovelas.