En la mañana de este lunes, 10 de diciembre de 2018, convocada por El CERMI, ante la puerta principal del palacio de Cibeles, sede del Ayuntamiento de Madrid, se han concentrado, entre las 11 y las 12 horas, más de un centenar de personas, entre las que pudimos identificar a los componentes del CERMI Madrid, los miembros del CERMI Estatal, los representantes de PREDIF, miembros de ASOCIDE, afiliados y trabajadores de la ONCE, la asociación la Barandilla , ASPAYM Madrid y la asociación Parkinson Madrid, o al ex director General de la Discapacidad Francisco Borja Fanjul entre otros.
En la fotografía de portada vemos entre otros personas a Francisco Vañó, ex diputado del Partido Popular que al ser nombrado Diputado en abril del año 2004 el Congreso se tuvo que adaptar para las personas con problemas de movilidad. A su lado vemos a Miguel Ángel García Oca, presidente de ASPAYM Madrid.
UN OBJETIVO COMÚN Y UNA DEMANDA PRIORITARIA
La lucha por la conservación de un medio ambiente sano en las grandes ciudades, (y también en las menos grandes es necesario) nos pone del lado de la eliminación al máximo posible de las fuentes de contaminación. Sin duda que los grandes motores, ya de gasoil ya de gasolina lo son, también los automóviles para el transporte de un solo viajero. La alternativa parece decantarse por el transporte individual motorizado, o no, con toda suerte de vehículos, antaño juguetes de niños, pero hoy motorizados mediante motores eléctricos con baterías recargables. Ello requiere readaptar las tradicionales infraestructuras que hay que cumplimentar con puntos de aparcamiento, estacionamiento y fuentes de alimentación eléctrica. Aquí, como siempre, la iniciativa privada, en la búsqueda de todo nicho de beneficio, no repara en acaparar para sí recursos propios y los que no lo son, utilizando el espacio público, en su mejor provecho.
Comenzaron los cochecitos eléctricos, que no pueden negar su condición de vehículos, por lo que se ven obligados a estacionar en la calzada, quieran o no. Pero se sienten agraviados porque las motos, todavía de gasolina (contaminantes, sí, o sí), aparcan en las aceras, bajo una regulación que se saltan a la torera sin que los funcionarios públicos, -policía municipal- y los llamados “agentes de movilidad” sean suficientes para mantener el orden en las aceras, donde aquellas –las motos- son las reinas de las esquinas, los aledaños de los pasos de peatones, las proximidades de las marquesinas de autobús y también los parque públicos. Ello no sería criticable si el tránsito de estos “vehículos de dos ruedas” no causaran riesgo de accidentes para los peatones.
El pasado 3 de noviembre estaban aparcados estos 3 patinetes delante de un ceda el paso en la calle Narváez de Madrid
Otro caso similar ha ocurrido con los desplazamientos en bicicletas (antaño sólo juguetes de nuestra infancia), que hoy, no estando bien determinados los lugares por donde han de transitar y huyendo también ellos del peligro que les supone la mayor contundencia y potencia de autos y motos, se refugian en las aceras, tanto para circular como para aparcar. Si lo primero afecta a la seguridad de los viandantes, lo segundo molesta al tránsito por las aceras, más a quienes más dificultades tenemos para hacerlo, ancianos, personas en sillas de ruedas, personas con muletas, ciegos y sordos, etc. Como siempre creamos una ciudad, tanto más inhóspita cuanto más vulnerable es la persona que la habita.
Por si todo lo anterior, hechos ya comprobados, fuese poco, ahora nos vienen los patinetes, que ya no nos los traen los Reyes Magos, porque llevan motor eléctrico y su valor supera lo aconsejable para un regalo. Pero tampoco serían factibles de estacionar en los domicilios, cada vez más reducidos y difíciles de acceder con semejante artilugio cuyo peso tampoco son los mil gramos del juguete. Ahora se necesita un lugar para circular y otro para estacionarlo. Pero si por su utilidad y menor nivel de contaminación para el centro de las ciudades son muy aconsejables, por la velocidad que pueden alcanzar son un alto nivel de riesgo para los peatones cuando dichos “vehículos” invaden el espacio natural del peatón, “la acera”.
Francisco Forte con Ignacio Benito, concejal del Ayuntamiento de Madrid.
En la puerta del Ayuntamiento hemos podido ver también al Concejal del PSOE Ignacio Benito, Presidente de la Comisión Permanente Ordinaria de Medio Ambiente y Movilidad (Portavoz Adjunto). Nos manifestó su interés por abordar el tema y plantear conjuntamente con el área de movilidad. Pareció querer decirnos, movilidad provoca la falta de seguridad, no evita los accidentes y luego los problemas de las personas con Discapacidad son mi área de competencia, sus problemas me vienen a mí.
El presidente del CERMI de la Comunidad de Madrid Oscar Moral nos ha declarado a esta emisora que ya son más de 17 las empresas que tienen solicitada autorización municipal para operar alquilando este tipo de vehículos. Cierto es que sólo Madrid y Barcelona tienen una normativa referida a su uso, pero el poco control del cumplimiento de esa normativa consigue que se usen sin orden ni concierto, dejándoles “abandonados en cualquier lugar de la acera, sin que el ayuntamiento tenga medios humanos suficientes para poner orden en este caos que se nos avecina. Por ello es que el CERMI Estatal, su homólogo de la CAM y PREDIF han convocado la concentración esta mañana.
En la fotografía vemos al presidente del CERMI Luis Cayo entre los pacientes del Hospital de Día Lajman Paquita y Francisco, locutores del programa «Conecta con nosotros» de la radio social labarandilla.org
Además reclaman una normativa más general que proceda de la DGT (Dirección general de Tráfico) que contemple el uso de esos “Vehículos a nivel Estatal, que contemple normas mínimas que cada ayuntamiento pueda desarrollar,pero preservando siempre los espacios públicos (parque) y las aceras como lugar exclusivo para el tránsito a pie, que es lo suyo.
Es evidente que la solución tiene que tener un ámbito competencial integral y contemplar todos los aspectos para poder satisfacer a todos los ciudadanos por completo. Afirmamos pues que la solución es para todos, o no será la adecuada.
Francisco Forte
Asociación la barandilla.
